La creación inspirada en esta figura invita a quien la porta a emprender un viaje atemporal a través de las adversidades de la vida con valentía y determinación, impulsado por la voluntad de afrontar cualquier peligro. La fragancia se abre con el seductor aroma de la embriagadora rosa búlgara, equilibrado por la frescura del pomelo siciliano y la profundidad del incienso omaní. Esta cabeza persuasiva descansa lascivamente sobre un lecho de flores cítricas y afrodisíacas, las hojas de violeta aportan un toque delicado mientras que la lactona lechosa y el coco tailandés aportan una dulzura envolvente. La fuerza de esta creación se basa en una base cálida y sensual; el silencio ensordecedor del almizcle envuelve el pachulí de Singapur, mientras que la cumarina, la vainilla de Madagascar y el caramelo turco liberan dulzura. Messaggero (palabra italiana para mensajero) es un viaje de mil años a través del tiempo y el espacio, al final del cual la única constante es la maravilla de sorprenderse.